Isla de Tambo, Galicia: El corazón secreto de las Rías Baixas
Desde muy pequeño recuerdo la Isla de Tambo como un lugar secreto y que siempre tuvo su misterio, por fin he podido conocerla de cerca.
Un gustazo además poder hacer el curso de guía de la Isla de Tambo, así que algún día igual me animo a montar un grupo y mostraros mi visión.
Ubicada en la Ría de Pontevedra, la Isla de Tambo es un rincón único en Galicia.
Desde su aspecto piramidal cubierto de eucaliptos hasta sus playas ocultas, esta isla encierra un tesoro de 28 hectáreas lleno de naturaleza e historia.
Además, este destino singular está cerca de Combarro, en el Concello de Poio en plenas Rías Baixas en la provincia de Pontevedra.
Tambo invita a descubrir un pasado que va desde ocupaciones monásticas hasta su uso militar.
A continuación, te cuento mis lugares imprescindibles para ver en la Isla de Tambo.
Un poco de historia sobre la Isla de Tambo
La idea de este artículo es dejaros algunas pinceladas para que os hagáis un poco a la idea de toda la historia que guarda esta isla.
Falta mucho por estudiar, hacer excavaciones arqueológicas y seguir buscando información relevante.
Por aquí estuvieron los celtas, hubo una pequeña aldea, campos de cultivo, monasterio, iglesias, cementerio y en épocas más recientes fue un lazareto.
Los monjes vivieron en la isla de Tambo desde el siglo VI hasta la desamortización de Mendizábal.
Posteriormente en el siglo XI y XII fue propiedad de los reyes de Galicia, Raimundo de Borgoña y Doña Urraca.
Doña Urraca decidió donar la isla en el siglo XII al Monasterio de Poio.
Luego pasó a ser un territorio militar y estuvo prohibido el acceso durante varias décadas.
Actualmente sigue siendo propiedad militar aunque tiene un acuerdo de cesión temporal al Concello de Poio.
Sabías que… La isla fue llamada en el pasado Thalavo, Tanavo, y finalmente, Tambo, nombre que evoca un «túmulo» o colina en latín, y que hace referencia a su peculiar forma.
1. Cómo Llegar a la Isla de Tambo y Navegar por la Ría de Pontevedra
En primer lugar, debes dirigirte al puerto de Combarro, donde salen los barcos que van a la Isla de Tambo.
El viaje dura poco más de 10 minutos y mientras disfrutas de las vistas de la costa de Marín y Poio.
Por aquí verás varias bateas, temporalmente fuera de uso, pero podrás verlas de cerca.
Disfruta del paseo mientras en el barco te contarán sobre de cultivo de mejillones, también tienes info en este otro articulo.
Finalmente, al acercarte, Tambo se va revelando en el horizonte con su singular silueta piramidal y preparándote para el desembarco.
Hace muchos años se podía cruzar a la isla caminando cuando bajaba mucho la marea desde el punto más cercano, por la zona de Chancelas.
2. Naturaleza de Tambo: Playas Vírgenes y Bosques de Eucaliptos
Igualmente, la Isla de Tambo posee una biodiversidad única, aunque actualmente los eucaliptos enormes ocupan parte de la isla.
Cierto que son de los más altos de Galicia ya que llevan muchos años plantados y no han sufrido incendios, sí algunas talas pero todavía ocupan gran parte de la isla.
Sus playas, como la playa de Area da Illa y playa de Adreira, son auténticos paraísos de arena blanca y aguas cristalinas.
La playa de Area da Illa es la mejor y la más grande de todas, la de Adreira es muy complicado acceder por tierra, la playa de Oeste está cerrada y la del Faro de Tenlo es muy pequeña
En principio la gente no se suele bañar, pero sería todo un punto, desde Combarro siempre flipé con estas playas.
Destacar un dato curioso de la playa de Adreira, aquí se realizaban bautismos clandestinos de la comunidad evangélica de Marín.
Alrededor de los años 1882 y 1899 se realizaron bautismos con frecuencia y algunos en años posteriores en esta pequeña playa.
A su alrededor, el paisaje está dominado por eucaliptos, plantados en los años 60 para camuflar las actividades militares de la época.
También puedes encontrar pinos autóctonos y una variedad de laurel y flora ornamental plantada para decorar durante la etapa militar.
No esperes mucha vegetación exuberante ni bosques autóctonos, la idea es ir repoblando y cambiando un poco el arbolado, pero precisa estudios previos y previsiones de técnicos.
Lo que hay aquí es un tipo de salamandra que es una especie endémica y protegida y un tipo de lagarto que también es una especie protegida
3. El Faro de Tenlo Chico, un icono de la Isla de Tambo
En cambio, al sur de la isla se encuentra el Faro de Tenlo Chico, una estructura troncocónica construida en 1922.
Este faro es un emblema de la isla y su silueta es visible desde distintos puntos de la costa.
Para quienes me seguís en mi cuenta de Instagram sabéis que me encanta acercarme a la playa de Lourido y ver el atardecer con la Isla de Tambo y el Faro de Tenlo como protagonistas.
Por lo tanto, el Faro de Tenlo Chico sirve como referencia para navegantes y como símbolo distintivo de Tambo.
Es más, su imagen ha inspirado leyendas. Probablemente, el pirata Benito Soto usó este faro como punto de referencia y, según rumores, escondió parte de su botín cerca de la Playa de Toralto.
Junto al faro hay un pequeño embarcadero, pero no está permitido atracar en este puerto, así que aviso a navegantes.
No os perdáis una pequeña cueva o furna que hay en la playa de Toralto que está junto al faro, se llama Cova das Pombas.
Se puede acceder con marea baja y su interior es muy curioso, pero recuerda no tocar nada y dejar todo como lo encontraste
4. Ruta Circular y Mirador Natural en el Monte San Facundo
Imprescindible seguir la ruta circular de 2,3 km que recorre la isla y que visita los lugares más destacados.
Comienza en el Embarcadero de Adreira y recorre todo el perímetro de la isla volviendo al punto de salida.
Además de recorrer todos los sitios de interés, esta ruta alcanza su punto más alto en el Monte San Facundo, a unos 80 metros sobre el nivel del mar.
Desde aquí, el mirador natural ofrece una estupenda vista de la Ría de Pontevedra y con un poco de imaginación cercana Isla de Ons.
Actualmente varios árboles tapan un poco la vista, pero da para hacerse una idea.
Hay otra ruta más corta desde el Embarcadero de Adreira hasta el Faro de Tenlo, con unos 600 metros de longitud.
Consejo para aventureros: No olvides llevar calzado cómodo y agua, ya que la ruta, aunque corta, puede ser un poco exigente.
Comentaros que de momento no hay baños en la isla, así que aprovechad antes de zarpar o en el barco para ir al baño.
5. Capilla de San Miguel y la devoción popular
La Isla de Tambo también alberga la Capilla de San Miguel, construida en el siglo XVIII.
Como consecuencia de su misticismo, esta capilla era un importante punto de peregrinación en su tiempo.
Cuenta la leyenda que en el S VII se invocó a San Miguel para que trajese agua a la isla y gracias a un rayo se hizo el milagro.
Cada 29 de septiembre, los habitantes de la comarca acudían para rendir homenaje a San Miguel.
Aunque ahora está en ruinas, se pueden ver restos de los antiguos muros.
Asimismo, se dice que esta capilla fue construida sobre un antiguo monasterio benedictino destruido por el pirata Francis Drake.
Parte de las piedras de esta capilla forman parte de los muros del Monasterio de Poio, en 1755
Ese monasterio era conocido como Monasterio de Santa María de Gracia, y se supone más o menos donde estaba ubicado.
Con tantos cambios en la isla, las piedras de monasterio, iglesias, etc fueron usadas para construir luego diferentes edificios del lazareto entre otras cosas.
Sobre el pirata Francis Drake y su estancia en la isla no hay ningún documento, sí que estuvieron piratas y la saquearon en esa época, pero sobre este personaje no hay documentación.
6. El Lazareto: Historia de un hospital de cuarentena
La historia del lazareto en la Isla de Tambo resulta impactante.
A mediados del siglo XIX, sobre 1865 el Lazareto de Tambo se construyó como hospital de cuarentena para marineros con enfermedades contagiosas.
Este edificio poseía un sistema de ventilación avanzada y capacidad para 100 enfermos.
Sobre todo, se diseñó con orientación norte-sur para optimizar la ventilación, inspirado en técnicas de arquitectura francesa.
Este lazareto sólo funcionó hasta 1879, cuando las enfermedades transmitidas por los viajeros de ultramar comenzaban a controlarse.
Igualmente, el edificio se conserva como un símbolo de la historia sanitaria de la isla.
Junto al lazareto principal había varios edificios para el personal, familiares y edificios auxiliares.
Los marineros debían pasar aquí una cuarentena, o sea unos 40 días antes de poder pisar tierra firme
No duró mucho tiempo porque debido a que estaba cerca de tierra y que se podía en momentos puntuales casi cruzar caminando al continente, se decidió cerrar.
Esta decisión fue motivada por un gran revuelo popular, entre las causas un brote de cólera en Pontevedra en 1855
7. Vestigios de la era militar: El polvorín y la base militar
Además de su uso sanitario, la Isla de Tambo fue empleada por el ejército español, concretamente por la Escuela Naval Militar de Marín.
De hecho, los vestigios de su uso militar aún están presentes.
La antigua base militar y el polvorín subterráneo son construcciones representativas de esta época.
Debido a su función militar, la vegetación cubría el polvorín para ocultarlo, lo cual le otorgó un aspecto casi místico.
Este almacén de 180 metros cuadrados se diseñó para guardar municiones y su acceso es a través de un pasillo abovedado.
Como resultado, el pasado militar de Tambo añade un aire de misterio a su encanto actual.
Había entre otras edificaciones militares una residencia de oficiales, una cantina y unos merenderos en la playa divididos por rangos.
Aquí no se mezclaban los grandes jefes y sus familias con los de memos rango, cada uno en su sitio y con playa privada.
8. La fuente de San Miguel y el misticismo de la Isla
La Fuente de San Miguel es uno de los pocos manantiales que quedan en la isla.
Es más, este manantial mantiene un vínculo con las leyendas de Tambo.
Antiguamente, la fuente servía como punto de entrada para los leprosos que acudían al lazareto.
Debido a las prácticas sanitarias de la época, los leprosos eran purificados con sosa cáustica antes de ingresar.
Hoy en día, la fuente es una parada de interés por su historia y la cruz tallada en la roca.
No está en muy buen estado, ya que le construyeron unas paredes de ladrillo y está pendiente de restauración.
9. Tafoni: Curiosidades geológicas
Igualmente, en la parte sur de la isla se encuentra un fenómeno geológico llamado tafoni.
Este tafoni es una formación de roca con agujeros y formas caprichosas, creadas por procesos de erosión.
Parece que la ceniza hallada en su base sugiere que pudo ser un refugio o lugar de rituales para los antiguos habitantes de la isla.
De hecho está propuesta para incluirla en el Inventario Español de Lugares de Interés Geológico (IELIG).
10. Vida silvestre y fauna marina en la Isla de Tambo
Finalmente, la Isla de Tambo alberga diversas especies de aves marinas, como cormoranes, gaviotas y garzas.
Además, sus aguas contienen una rica variedad de fauna marina, incluyendo peces y mariscos.
Es más, las «bateas» que rodean la isla hay varias en funcionamiento y son perfectas para el cultivo de mejillones.
Sobre vegetación ya os hablé antes, el 90% son eucaliptos, luego hay pinos, acacias, laurisilva y algún roble americano.
Tal y como os contaba antes son interesantes un tipo de lagartija y otro de salamandra, pero luego no hay ni conejos, ni otros mamíferos.
Durante la etapa militar tuvieron una pequeña granja con algunos cerdos es una de las edificaciones próximas al lazareto.
Sobre la cetárea que hubo en la Isla de Tambo podéis ver los restos de sus muros en un extremo de la playa de Area da Illa, uno de los muros es el peirao o embarcadero da Ostreira
¿Te Atreves a Descubrir la Isla de Tambo?
La Isla de Tambo es una de esas visitas que te recomiendo si te apetece hacer un plan diferente cerca de Pontevedra
Probablemente, ningún otro lugar en Galicia reúne tantos elementos en tan poco espacio.
Si quieres vivir esta aventura reserva tu visita y explora la magia de este tesoro oculto en las Rías Baixas.
Para hacerlo te hace falta solicitar un permiso en este enlace y comprar el billete de barco.
Algo más sencillo es entrar en este enlace y ellos se ocupan de todo.
Por el momento las visitas están limitadas a grupos de 50 personas máximo y un total de 200 diarias.
Los precios rondan los 15 euros y las visitas suelen ser más frecuentes en temporada alta y fines de semana.
También puedes contactar con las empresas Cruceros Pelegrín y Mar de Ons, ellos tambien hacen estas rutas.
Cualquier información complementaria os la pueden dar en la oficina de turismo de Poio.
Recuerda que por el momento en la isla no hay baños, ni bar ni nada donde comprar agua o ir al servicio.
Espero que esta pequeña guía de Tambo os sirva de inspiración y ya tengo en mente otros artículos con curiosidades de esta isla tan misteriosa.
No dudes en dejar en comentarios todo lo que puedas aportar a otros viajeros sobre este lugar para que puedan conocerlo.
No conocíamos esta isla, está chulo que esté tan limitado y tan «virgen», tomamos nota para nuestra próxima visita a las Rías Baixas que tanto nos gusta.
Saludos y gracias por la info!
Una isla con mucha historia y que se puede visitar desde hace unos meses. Espero que conserven este legado de la mejor manera posible
No tenia ni idea de l Isla de Tambo, ¡¡vaya descubrimiento!!
Ya sabes, otro lugar para visitar cuando vengas a Galicia
Me encanta Galicia y no conocía la isla de Tambo. Apuntado para cuando vuelva por allí que espero pueda ser el año que viene.
Muy chulo el post
Un saludo 👋
Muchas gracias Charo, es una isla poco conocida y con una historia fascinante. Espero que pronto puedas conocerla.
¡¡Que sitio tan chulo!! No lo conocíamos así que nos lo apuntamos para nuestra próxima visita a Galicia.
Apunta para cuando vengas a Galicia, seguro que os sorprende
¡Qué interesante todo lo que cuentas sobre esta isla! El año pasado estuvimos por las Rías Baixas y no conocíamos la existencia de este sitio. Eso significa que habrá que volver 😉
Por supuesto, aquí siempre hay planes nuevos y lugares chulos para visitar. Espero que podáis volver muy pronto
Interesante Isla!!! Galicia es una de las deudas que quedan en España y espero que más pronto que tarde podamos sellarla. Con respecto a tu posteo, está buenísmo, lleno de tips, consejos y recomendaciones para conocer la Isla de Tambo ¡felicitaciones!
Muchas gracias Pato, se puede visitar desde hace poco tiempo y es genial ver como todavía se conservan algunos restos históricos interesantes